Sri Swami Abhedananda, autor de Reencarnación, es uno de los autores más prolíficos de la denominada corriente vedantina difundida
en Occidente por importantes brahamines entre los que se destacó, junto con Sri
Swami Vivekananda y otros grandes yoguis. Vivió en una época signada por el auge
del Orientalismo en Europa, que coincidió con el interés suscitado por las doctrinas de
Teosofía. Fue uno de los principales dirigentes de la Vedanta
Society, intelectual de gran envergadura e incansable viajero.
Swami Abhedananda
Su libro “Reencarnación”
es un ensayo crítico, escrito con el objeto de plantear la alternativa de la teoría reencarnacionista -propia de las religiones de Oriente en general y de la Vedanta en particular- frente a las ideas post mortem occidentales,. De allí que, en el
centro del análisis, Abhedananda establezca una confrontación entre
Reencarnación y Herencia, Reencarnación y Evolución, Resurrección y Encarnación
frente al análisis científico y una concepción general del concepto de “Transmigración”.
El libro representa un desafío ético y ontológico, es decir, nos coloca frente al
dilema de la vida después de la muerte, pero también –y principalmente- frente a una
concepción particular de la denominada Constitución
Oculta del Hombre, estableciendo las relaciones entre cuerpo, mente, alma y
destino. Dentro de la vasta bibliografía que se ha publicado sobre el tema,
este ensayo sigue siendo de una originalidad absoluta, pues a diferencia de
muchas otras obras, contiene el conocimiento decantado de un alma peregrina,
surgida de las entrañas mismas de la milenaria India.
Abhedananda nació el 2
de octubre 1866 con el nombre de Kaliprasad Chandra, en el norte de Calcuta. En
1884, a la edad de 18 años, cuando se disponía a terminar sus estudios, viajó a Dakshineswar y conoció a Sri Ramakrishna. Este encuentro
cambiaría su vida. Decidió abandonar su casa y seguir los pasos del viejo
maestro, que ya estaba enfermo. Considerado discípulo y heredero espiritual de
Ramakrishna y uno de los más lúcidos entre los maestros del hinduismo, la obra
de Abhedananda ha sido de gran importancia no sólo en la India sino en Europa, Estados
Unidos de América y otros países de Occidente, como Canadá y México.
A la muerte de
Ramakrishna, acaecida en 1886, Kaliprasad se sumergió en un profundo estado de
sadhana (meditación), hasta que finalmente se convirtió en sannyasi -una suerte de monje mendicante- que lo llevó a
vivir durante diez años, viajando por toda la India. Para entonces ya era
conocido como Swami Abhedananda. Durante su período de asceta vivió de las
limosnas que le ofrecían a su paso, como es constumbre en la India con los
hombres santos. En esta etapa de su vida forjó su fama de
orador enérgico, yogui consumado y escritor prolífico.
Pasada una larga
temporada en el Himalaya viajó a Londres para unirse a Sri Swami Vivekananda
que se encontraba empeñado en difundir la filosofía Vedanta en Europa. Posteriormente
en 1897, y a pedido del propio Vivekananda, se haría cargo de la sede de la
Vedanta Society, establecida en Nueva York. Regresó a la India en 1921, luego
de haber viajado durante más de 25 años por distintos países. Un año después,
en 1922, cruzó el Himalaya a pie para llegar al Tibet. Aquí se abre una etapa
misteriosa de su vida, porque además de estudiar la filosofía budista y el lamaísmo,
se cree que descubrió un antiguo manuscrito sobre los años perdidos de la vida
de Jesús, interesándose profundamente por el cristianismo.
Este interés de Swami
Abhedananda por las religiones –especialmente el cristianismo y el budismo- a
los que debe sumarse su estancia en Inglaterra y América explican las numerosas
citas eruditas de sus libros, que no se limitan a una exposición de la
Reencarnación desde la concepción exclusivamente vedantina, sino que explora el
problema de la transmigración de las almas en libros de la tradición judía,
como el Talmud y el Zohar o en textos cristianos, específicamente en los
Evangelios.
Murió el 8 de
septiembre de 1939 en la sede de la escuela Vedanta, que había creado en Darjeeling. Su
legado es inmenso. Su libro “Reencarnación” sigue arrojando luz sobre uno de los
temas más apasionantes de la espiritualidad contemporánea.