Alejandro Chiarella nos presenta el método y las claves para la práctica de un Yoga dinámico, adecuado para la vida moderna y nuestra cultura occidental: Ashtanga Vinyasa Yoga
Sabemos que el origen de la palabra Yoga proviene de
la raíz sánscrita yug, que significa unión. Su antigüedad se remonta a la India
milenaria y hace referencia a la unión del alma individual con la divinidad;
pero también admite otras interpretaciones.
Dice Alejandro Chiarella:
“
Yoga es un estado de la mente donde las ondulaciones se aquietan, la mente se
calma, se aclara y concentra y no se distrae de sus habituales movimientos
involuntarios… De esta manera se actualiza la unión con el momento, la
presencia… El estado de Yoga está más allá del mundo de los pensamientos, de la
opiniones, del ir y venir de la cabeza; está más bien relacionado con el
silencio por debajo de los pensamientos, así como el papel lo está en las
palabras escritas…”
Unos de los textos más antiguos que se conocen sobre
esta disciplina son los denominados Yoga Sutras de Patanjali, escritos hace
aproximadamente 2.300 años, aunque es probable que la práctica del Yoga se
remonte a cinco milenios. Son justamente estos textos atribuidos al filósofo y
pensador hindú Patanjali los que dicen que el Yoga es ese estado de la mente en el que
las ondulaciones se aquietan.
La obra escrita por Alejandro Chiarella describe el
método conocido como Ashtanga Vinyasa Yoga. El término Ashtanga puede
traducirse como “ocho peldaños” en tanto que Vinyasa significa “ir a través”.
Podríamos decir que este método para la práctica individual propone un Yoga
que se realiza a través de ocho peldaños. Chiarella afirma haber encontrado en
este sistema una forma dinámica de Yoga adecuada para la vida moderna y la
sociedad occidental. Lo define como una forma de Yoga fuerte y enérgico.
El lector se encontrará con un libro eminentemente
práctico, en el que el autor vuelca una vasta experiencia adquirida de manera
directa con grandes maestros de este sistema en centros internacionales
dedicados al Ashtanga Vinyasa Yoga. La potencia de la respiración y los
movimientos entre las posturas lo llevaron a definirlo como una “meditación en
movimiento”, un “Gran Mandala” al que
decidió dedicarse plenamente.
Chiarella estudió Ashtanga Vinyasa Yoga con
instructores de Nueva Zelanda, Australia y Estados Unidos de América. Luego
lo haría con Sri Pattabhi Jois, heredero de este sistema y su máximo
exponente, junto a su nieto Sharath Ransanwami. Finalmente traería el método a
Buenos Aires en el que continúa expandiéndose en la actualidad.
El Ahstanga, o las “ocho prácticas” han sido extraídas
de los mencionados Yoga Sutras de Patanjali y se dividen tal como sigue:
1.- Yama (Comportamiento)
2.- Niyama (Comportamiento Interno)
3.- Asana (Posturas del Yoga)
4.- Pranayama (Control de la Respiración)
5.- Pratyahara (Llevar los Sentidos Adentro o propiocepción)
6.- Dharana (Concentración)
7.- Dhyana (Meditación)
8.- Samadhi Iluminación)
El Vinyasa, ese “movimiento”, el “ir a través” son las
prácticas respiratorias que se realizan entre las asanas (posturas). En una
metáfora muy apropiada Alejandro Chiarella
explica que el Ashtanga es una suerte de rosario en el que las perlas
son las posturas y las Vinyasas el hilo que las une.
La primera parte del libro no sólo explica estas características
del Ashtanga Vinyasa Yoga sino que aborda sus efectos fisiológicos y pránicos.
La segunda parte está dedicada por completo a la práctica con numerosas
ilustraciones que permiten avanzar en los primeros pasos.
Ashtanga Vinyasa Yoga de Alejandro Chiarella nos
propone un Yoga dinámico con métodos y claves para el desarrollo de una
práctica individual que numerosos lectores encontrarán apropiado para
incorporar en el ritmo de vida de nuestra cultura occidental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario